domingo, 18 de enero de 2015

No creo


A estas alturas creo en muy pocas cosas.
He leído algunos libros, he viajado un poco, he sufrido a tiempo completo.
He visto minotauros convertidos en cervatillos,
he visto intelectuales sometidos,
he visto líderes políticos sobornados por Narciso,
he visto sindicalistas ricos.
Por todas estas cosas que he visto, hoy, creo en tan pocas.
Por eso los discursos que escucho me suenan vacíos.
Porque es fácil llenar el aire con palabras que tienen sentido,
es fácil sobornarnos con promesas,
es fácil hacer magia cuando los que te miran están ciegos de pobreza y de conciencia.
Pero hace falta algo más que palabras huecas,
hace falta coraje para poner en claro las cuentas
y los que tienen coraje o están en la cárcel o los silencian.
Será por esto, por lo que no creo en los que hablan demasiado.
Alto y claro, se les oye.
Les dejan porque el poder no tiembla.

2 comentarios:

  1. El poder no deja lugar a nadie, quiere la playa para quedarse con todo el Sol, cuando descubre que justo al lado hay otra tambien la quiere para el, las toma todas pero siempre hay mas mares y mas playas y oceanos y glaciares.

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  2. Quieren luchar contra las consecuencias del problema y no contra las causas(para eso hay que tener huevos, con perdón), por ello no podrán hacer gran cosa.No puedo, sino ser suspicar, y pensar que están puestos por el propio sistema fascista que nos gobierna, para inyectar un poco de esperanza a una población ya asqueada, sometida, vilipendiada,...
    de tanta corrupción y tanta mentira.UN ABRAZO.SALUD.

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