*** Los lobotomizados de la letra, el cante y el arte (15/5/2010)

Viñeta de El roto

He necesitado un tiempo para reponerme, un tiempo, en el que he tratado de comprender por qué la gente suscribe el manifiesto exigiendo democracia a Cuba.
Es como si estuvieran tuertos o parcialmente ciegos o sencillamente ciegos y no vieran cosas que a la vista de todos están.
Esta gente que mueve el culo y la pluma para pedir libertad en países soberanos, no dicen nada sobre lo que ocurre en esta casa que algunos llaman España.
No saben de la tortura. No saben de los partidos políticos ilegalizados, no saben de los presos políticos que están en las cárceles, no saben de los medios de comunicación cerrados, de la violencia, no saben y si lo saben callan.
Enfermos de vanidad mueven la cola
Hacen propaganda grosera, masturban el sistema.
Se convierten en inquisidores, en vigilantes de su democracia tan vacía de justicia y como hace quinientos años, sueñan con llegar a América y reconquistarla con su verdad a medias.

Son la sociedad de los imbéciles, de los útiles, de los que se lanzan al linchamiento y ponen su jabón para limpiar la sangre.
En su falso escenario representan la opereta, el desatino, sirven de coartada y sonríen con la mano sobre la ceja. Huelen a podrido, a rancio, a oportunismo. Viven en un país de espejismos.
Son los lobotomizados de la letra, el cante y el arte.
¡Y a mí me dan tanta vergüenza¡